Noticias de Última Hora

Los misiles vuelan y las bombas caen, pero Dios sigue en control. Se avecinan tormentas y la tierra tiembla, pero Dios sigue en control. Los precios se disparan mientras los recursos escasean, pero Dios sigue en control. Las protestas aumentan mientras la sensación de seguridad es fugaz, pero Dios sigue en control. Hay muchas noticias de última hora, pero sin importar lo que se transmita, servimos a un Dios trascendente que es soberano sobre todo, y nada lo toma por sorpresa. Lo que para nosotros es noticia de última hora ya ha sucedido para Él. Todo esto está en su plan, así que podemos descansar en Él y confiar en Él. No hay nada nuevo bajo el sol para Él. Él tiene el control total.

Yo soy el Señor, y no hay otro; fuera de mí no hay Dios. Yo te ceñiré, aunque no me hayas conocido; para que sepan desde el amanecer hasta el ocaso que no hay nadie más que yo. Yo soy el Señor, y no hay otro, el que forma la luz y crea las tinieblas, el que causa el bienestar y crea la calamidad; yo soy el Señor, el que hace todo esto. Salmo 45:5-7

¿Por qué, entonces, nos preocupamos tanto por todo lo que sucede a nuestro alrededor cuando no hay otro dios mayor que nuestro Dios? Él es el Creador de los cielos y la tierra. Nada sucede sin su permiso. Dios obra todas las cosas para bien de quienes lo aman y son llamados a cumplir su propósito. Lo que el diablo planea para mal, Dios lo transformará en bien. Entonces, ¿por qué nos preocupamos tanto?

Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su cuerpo, qué vestirán. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Observen las aves del cielo: no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, su Padre celestial las alimenta. ¿Acaso no valen ustedes mucho más que ellas? ¿Y quién de ustedes, por mucho que se preocupe, puede añadir una sola hora a su vida? ¿Y por qué se preocupan por la ropa? Observen cómo crecen los lirios del campo: no trabajan ni hilan; sin embargo, les digo que ni siquiera Salomón en toda su gloria se vistió como uno de ellos. Pero si Dios viste así a la hierba del campo, que hoy está viva y mañana es arrojada al horno, ¿no los vestirá mucho más a ustedes? ¡Hombres de poca fe! No se preocupen, pues, diciendo: "¿Qué comeremos?", "¿Qué beberemos?", "¿Con qué nos vestiremos?", porque los gentiles ansiosamente buscan todas estas cosas; pues su Padre celestial sabe que necesitan todas estas cosas. Pero busquen primero su reino y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. Así que no se preocupen por el mañana; porque el mañana se preocupará por sí mismo. Cada día tiene sus propios problemas. Mateo 6:25-34

Debemos confiar en que nuestro Padre Celestial nos cuida cuando todo a nuestro alrededor se vuelve loco. No tenemos que preocuparnos. Él vela por nosotros. Solo necesitamos permanecer bajo sus alas y obedecerlo. Necesitamos mantenernos firmes en su Palabra y dejar que Él luche por nosotros. Veremos su salvación. Podemos alabarlo con la seguridad de que la batalla es suya y que Él está trabajando a nuestro favor mientras nos mantengamos en su camino.

Y dijo: «Escuchen, todo Judá, habitantes de Jerusalén y rey ​​Josafat: así les dice el Señor: ‘No teman ni se acobarden ante esta gran multitud, porque la batalla no es de ustedes, sino de Dios. Mañana desciendan contra ellos. He aquí, subirán por la cuesta de Ziz, y los encontrarán al final del valle, frente al desierto de Jeruel. No necesitan pelear en esta batalla; ¡Arriba, ponte de pie y contempla la salvación que el Señor hará por ti, oh Judá y Jerusalén! No temas ni desmayes; mañana sal a enfrentarlos, porque el Señor está contigo. 2 Crónicas 20:15-17

No tenemos por qué temer porque el Señor está con nosotros. ¡Qué asombroso! El Creador del universo nos acompaña dondequiera que vayamos y nos cuida. Este Dios infinito obra sin límites en nuestras vidas. Es inconmovible. Inamovible. Abre caminos donde parece imposible, yendo delante de nosotros y enderezando los senderos torcidos. Ninguna noticia lo sorprende; él es nuestro Guardián.

El Señor es tu guardián; el Señor es tu sombra a tu diestra. El sol no te fatigará de día, ni la luna de noche. El Señor te protegerá de todo mal; guardará tu alma. El Señor guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre. Salmo 121:5-8

Estas son mis últimas noticias. El Señor nos guarda y nos protege del mal. Él guarda nuestra alma. Así que, no hagamos nada con nuestras propias fuerzas, recordando que las armas de nuestra milicia no son de este mundo. Y usemos estas armas divinas para derribar todo razonamiento humano que se oponga al conocimiento del Señor. Debemos dominar todo pensamiento para obedecer a Dios y dejar de escuchar las mentiras del enemigo que nos inundan de un temor que no proviene de Dios. El Señor está completamente al mando, y esto nunca cambiará, por mucho que el mundo parezca estar sumido en el caos y las noticias parezcan empeorar.